Tercer curso y no se las tablas de multiplicar
Por qué la educación del país debe mejorar
Hace poco conocí el caso de una estudiante de una colegio fiscal de una de las parroquias del Distrito de Quito, cuya dificultad era no ser hábil para las matemáticas y el cálculo en su Colegio. Pregunté a quién me compartió el caso, una estudiante de Ciencias Químicas de la Universidad que dicta clases personalizadas de nivelación, cuál era la dificultad que tenía la joven. Me respondió: “no sabe las tablas y mandé a que las aprenda”. Supuse que se refería a las tablas de multiplicar, pero reflexioné del hecho de que todo estudiante las supera antes de abandonar la primaria, entonces le dije que debía estudiar la tabla de química junto con ella para facilitarle el estudio. ¡Sorpresa! No se trataba de la consabida tabla periódica de los elementos químicos, sino efectivamente de mi presunción, las tablas de multiplicar y la joven cursaba el tercer curso de colegio.
Analizando más a profundidad el tema, descubrimos que la joven le presta poca atención a sus estudios, no tiene la voluntad por superarse en ellos, lo cual profundizó mi tristeza. La amiga que me compartió este caso manifestó su voluntad de ayudar a la joven por pedido explícito de sus padres, yo no hice otra cosa que apoyar moralmente su decisión, y estimularla en su acción social. Es una pena que en nuestra sociedad se den estos casos, no creo que sea el único en territorio del Ecuador. Pero mi inquietud crece por entender como aquella joven paso cada curso y año de Colegio, es acaso esta la educación fiscal que buscan proteger grupos políticos infiltrados en el Sistema de Educación Nacional, queremos para nuestros jóvenes y niños facilidad y que me importismo a la hora de cursar sus años de formación. ¡No! Definitivamente no. Es un problema social que constriñe el interés de padres, docentes, alumnos y especialmente el interés de las autoridades de Educación; desde esta mira, la evaluación académica y regulación de la educación tiene toda validez, apoyo legítimo para superar fallas en la calidad. Si eso se busca el Ministerio de Educación, hay que hacer notar nuestro respaldo a una acción soberana, es decir mayoritaria a los cambios que posibilitan el desarrollo de nuestra nación.
Mi Cris espero que estas pruebas a los prefesores sirvan de algo para verdaderamente no tener que volver a contar otra ves una historia como esta!
ResponderEliminarYo aún estoy esperando el libro que me ibas a regalar! ;)
Preciosa amiga, las historias como estas no deben repetirse si todos contribuimos a respaldar las políticas de Estado que mejoran firmemente el escenario de nuestro país.
ResponderEliminarTu libro espera por ti, será oportuno vernos en algún encuentro y compartirte, un abrazo.
CHUZO... eso ocurre cuando creces con la calculadora en un bolsillo y el celu en el otro... claro, también está el problema de la falta de interés y todo aquello...
ResponderEliminarpero, qué podemos esperar de una sociedad automatizada en donde para colmo se pretenden eliminar los estudios humanísticos?
p.d: procura usar una imagen menos personal en la cabecera de tu blog, jeje
ResponderEliminarVerdad mucha verdad, ahora la tecnología es la culpable de nuestros desordenes, claro digo para los indisciplinados je je. Ahora, no me queda claro lo de los estudios en humanidades, que tiene que ver lo uno con lo otro, el bajo desempeño es en las ciencias exactas????
ResponderEliminarDe cualquier modo, tu comentario es una joya, y más es la nota p.d, la tomaré en cuenta para se menos personal. Un abrazo excelente revista la Caricato, algo de reflexión y mucho humor, o al revés como sea.